Cuando duró nos llevamos bien. He aquí la historia de una relación, inusual e inesperada, entre una tica y Londres. (Ahora vivo en Oslo)
24 ago 2010
Mi primera compañera de clase con 82 años
En el curso de escritura creativa en Oxford (ver entradas abajo) tuve compañeros de ambos sexos, encantadores, inteligentes, estimulantes. Y una de ellas fue la mítica Ruth Cupp.
Ella es abogada y aún practica leyes a sus 82 años. Asistió al curso de Oxford pues está escribiendo un libro y quería aprender a escribir mejor. Además siempre había querido estudiar un tiempo en esa Universidad.
Una tarde me fui a tomar té con Ruth y quedé inspirada con su historia y ese espírito independiente (quedó viuda en 1993, no tuvo hijos y lleva muchos años dedicada a cultivar una vida muy interesante). Fue la única estudiante mujer en las clases en la facultad de derecho en los años cincuenta. (No recuerdo el nombre de la Universidad).
También conversamos de las ventajas de tener 82 años.
Debemos apreciar a las mujeres que celebran sus ocho décadas y abolir el culto a la eterna juventud!
Las mujeres como Ruth pueden todavía pueden aportar muchísimo a la sociedad. Son mentes sabias y corazones experimentados. Que triste que en la sociedad las relegamos a un rol de abuelas. Ser abuela es algo precioso. Pero el abanico de posibilidades es mucho más amplio: escribir libros, leer, pintar, llevar cursos, tomar fotografía y no
R
uth me confirmó lo que sospechaba... y más.